Agentes de la Policía Nacional salvaron ayer en Gandia la vida de un menor de 14 años que se atragantó con un caramelo ejecutando la maniobra de Heimlinch. Gracias a su rápida actuación, los policías consiguieron que expulsara la golosina que le obstruía las vías respiratorias.

Los policías se encontraban realizando labores propias de la seguridad ciudadana en Gandia, cuando fueron alertados a gritos por un grupo de jóvenes que pedían auxilio y referían “socorro, socorro, mi primo se ahoga, no respira”.

Rápidamente los agentes apearon el vehículo policial y se dirigieron al lugar donde se encontraba el menor, observando al joven amoratado, pálido y con dificultades para respirar. Fue en ese momento cuando los policías comenzaron a realizarle la maniobra de Heimlinch. 

Los policías le realizaron la maniobra hasta en tres ocasiones, consiguiendo finalmente que el joven expulsase el caramelo y volviese a respirar recuperando las constantes vitales. Gracias a su rápida intervención, el joven salvó su vida, encontrándose en buen estado.